El cibercrimen y sus delitos fueron analizados durante jornadas académicas

BOLETÍN OFICIAL 517

4 de noviembre de 2020

Quito, Ecuador- La primera de las cuatro sesiones que conforman la Jornada de charlas Cibercrimen y Seguridad en Internet, se desarrolló, el lunes, 26 de octubre de 2020, con la intervención de la experta Diana Proaño. El encuentro es organizado por la facultad de Jurisprudencia de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), donde participarán hasta el 29 de octubre expertos nacionales e internacionales.

Durante la intervención de la especialista abarcó la conceptualización de cibercrimen, de origen anglosajón; así como exponer los diversos tipos de delitos existentes en internet y algunas recomendaciones para evitar ser víctimas de estos.

Y es que, para entender qué es y cómo se desarrolla el cibercrimen, se debe partir comprendiendo que este es un fenómeno que trasciende las fronteras y que se constituye en el conjunto de conductas criminales que se desarrollan en el ciberespacio, cuyas características son tan propias que marcan diferencia con la delincuencia física, principalmente porque ha surgido con el advenimiento de los sistemas informáticos.

En este sentido, recalcó que, si bien en un inicio el cibercrimen surgió como un evento solitario, con la evolución de la tecnología, este se ha convertido en un negocio rentable, conformado por organizaciones criminales internacionales, que han prosperado por diversificar los delitos y sobre todo, especializarse y usar sofisticados sistemas.

De ahí que, señaló la experta, en este espacio digital han surgido una serie de ciberdelitos como el denominado CP o Child Porn, grooming, ciberbullying, revancha pornográfica.

De acuerdo con la experta, en el Ecuador se está trabajando en un proyecto de Ley sobre violencia digital. La idea es incluir este fenómeno y el ciberacoso sexual como delitos tipificados en el Código Orgánico Integral Penal (art. 175) como delitos contra la integridad sexual y reproductiva.

Así también, describió otros hechos anómalos que se presentan en las redes sociales, como son los denominados retos virales, entre los más sonados: ballena azul que conduce al suicidio, barebacking o reto que invita a tener relaciones sexuales con desconocidos con el fin de contraer VIH; el reto de desaparecer 48 horas, los desafías del momo, sal y hielo que sobre la piel producen lesiones corporales, el rompe cráneos, pero con efectos fatales.

Para la técnica detener estos delitos es no compartir videos o fotos con contenido sexual o íntimo, como individuos tener la capacidad de resistir la presión social y no ceder a propuestas aun cuando estas sean solicitadas por personas allegadas; así también es importante controlar los tiempos de uso de internet y de redes sociales. Además, que no es recomendable que los menores de edad tengan cuentas en redes sociales.

Finalmente señaló que en caso de haber sido víctima puede hacer la denuncia en la Fiscalía General del Estado, de manera virtual o física. Para ello es necesario adjuntar la evidencia del delito, así como entregar todos los datos posibles para facilitar la investigación. /Internet Segura

 

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